Destino: Asturias

FICHA TÉCNICA:
Nombre original: Asturias
Idioma oficial: Español
País: España
Moneda: Euro
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Viajeras: Rocío y Andrea / Rocío
Días: 2 y 2
Fecha: Enero y Septiembre 2012

Lugares de interés:

Obligados:
Oviedo
Gijón
Lagos de Covadonga
Secundarios:
Múltiples pueblos costeros
Espacios protegidos

Asturias es una comunidad que si quieres visitar todos los sitios que merezcan la pena, más te vale dedicarte sólo a eso toda tu vida. En sus más de 10.500 km² abarca una gran extensión de playas e impresionantes sistemas montañosos con sus espacios protegidos por toda la comunidad.

En las dos ocasiones para el alojamiento contamos con un piso que tiene mi familia en Gijón, así que los desplazamientos a los lugares de visita que vaya contando partirán de ahí. Las dos veces también fuimos a los Lagos de Covadonga, por lo que empezaré por ahí.

Lago Enol

Nosotros salimos de casa hacia las 10:00h, para aprovechar bien el día y pasar la mañana en los lagos, pues se tarda poco más de una hora desde gijón. Se encuentran en el Parque Nacional de Picos de Europa, en la comarca Oriente de Asturias, y son el Lago Enol y un poco más arriba el Lago Ercina. Si tenéis suerte y hace buen tiempo, en el Lago Ercina hay un bar en el que tomar algo mientras se disfruta de las maravillosas vistas. 

Y después de la mañana en los lagos, cómo no, llega la hora de comer, y qué mejor que disfrutar de una buena fabada asturiana en Cangas de Onís, por donde se pasa para llegar a Covadonga. 

En la Avenida Covadonga, a la que llegáis nada más entrar a Cangas, hay varios sitios típicos para comer y a buen precio, menús a unos 10 euros más o menos. En el viaje de septiembre comimos en uno en Avenida Covadonga esquina Calle Parke, que está en una plaza. Nosotros comimos de primero unas fabes, y de segundo algo típico de la zona de Onís, el emberzau, que es morcilla envuelta en hojas de berza y se suele hacer frita o a la plancha.

En Cangas encontramos también su famoso puente romano, por debajo del cual pasa el río Sella. 

A la vuelta de Cangas de Onís paramos en el mirador del Fitu, desde el cual se ven hacia el sur-este los Picos de Europa, y hacia el norte la costa de Colunga, Caravia y Ribadesella.


Oviedo, capital de Asturias como bien sabéis, se encuentra a media hora de Gijón. Fuimos por la tarde, y tomamos algo cerca de la plaza del ayuntamiento. Es una ciudad para pasear y aprovechar a probar cositas típicas. 

También cuenta con algunas esculturas, entre las que están una de Woody Allen, en la calle Milicias Nacionales, al lado de un bonito parque por el cual pasear. En la calle Pelayo, frente al teatro Campoamor podemos encontrar el Culis Monumentalibus, de Úrculo, que si tenéis un poco de imaginación sólo con el nombre os podéis imaginar qué es, pero os lo voy a facilitar y os dejo una foto. 
Y cómo no, tenemos también  La Regenta, en la plaza de la Catedral.

Por supuesto, si sólo vas a Oviedo, no puedes irte sin probar la sidra. Las sidrerías más destacadas son la del Ferroviario y la sidrería Asturias.

Y de sitios obligados nos queda Gijón. Se encuentra en la costa y es el municipio más poblado de Asturias. Sí, más que Oviedo.

La mayor parte de las cosas que hay que ver en Gijón se puede hacer paseando. En mi opinión, la parte más bonita es Cimadevilla, el casco antiguo. Todas esas callejuelas al principio de la playa de San Lorenzo, donde también se encuentra la Iglesia de San Pedro.

El Cerro de Santa Catalina, que cuenta con la obra del escultor Eduardo Chillida "El Elogio del Horizonte", también es un sitio que hay que ver sí o sí. 



No podemos olvidarnos tampoco de la Plaza Mayor, el puerto y la estatua de Don Pelayo que están al otro lado.

Si vais con tiempo, no dejéis de ver las termas romanas, situadas al lado de la Iglesia de San Pedro, y el Jardín Botánico Atlántico, que se encuentra a las afueras y al que se puede llegar con las líneas e autobús urbano. La entrada es barata e incluye consumición dentro.

Y ahora llega el turismo que más me gusta a mí: naturaleza, paisajes y pueblos pequeños.

Empezaré por Salinas, situado en la costa, a pocos minutos al norte de Avilés. Tiene una de las playas más extensas de Asturias, dividida en dos, y un mirador estupendo en el extremo para ver toda la playa y cómo rompen las olas a tus pies. 
Nosotros comimos allí un menú por 10€, un precio bastante asequible.

Y ahora le llega el turno a un pueblo que recomiendo a todo el mundo que vaya a verlo: Luarca. Desde Gijón se llega por la A-8 hacia el oeste y se tarda una hora escasa. Se podría describir como un pueblo pesquero encajado entre montañas. Consta de tres playas, y a vista de pájaro se puede ver cómo el río Negro desemboca en la primera de ellas.

Como pueblo pesquero que es, su puerto es de los más importantes de Asturias.

Nosotros llegamos hacia la hora de comer, y después de pasear un poco por el pueblo y la playa subimos a La Atalaya, mirador en un saliente hacia el mar desde el que se ve el pueblo a la perfección si miras hacia atrás, y el mar hasta el horizonte mirando hacia delante. Llevábamos bocadillos, y comimos ahí arriba con esas magníficas vistas.





Y llegó el día de partir de Asturias, pero como nos quedamos con ganas, no nos fuimos a casa, si no que fuimos a San Sebastián, lo que contaré en otra entrada, y de camino paramos en el Complejo de Cobijero, literalmente pegado a Buelna, cerca de Llanes, justo a la salida del pueblo, yendo desde Gijón. Lo había visto en internet y se me antojó ir, y ha sido de mis mejores decisiones.

Este complejo está formado por la playa de Las Acacias y la cueva de Cobijero. La playa es una playa interior que comunica con el mar por dos conductos. Bueno, creo que es mejor que lo veáis, porque siempre me voy a quedar corta describiéndolo.

Como supondréis no se puede llegar hasta ahí mismo con el coche. Se deja al lado de la carretera y luego hay que seguir un camino primero por tierra y luego ya empieza la vegetación, y finalmente este espectáculo. No tiene pérdida.

Obviamente, si esto es una playa y está comunicada con el mar, detrás de esa ladera es lo que hay, pero no es playa, son unos acantilados preciosos también, un regalo para la vista.










Y hasta aquí mis conocimientos sobre Asturias. Volveré y visitaré mil sitios más para contároslo, porque, por si no se nota, esta tierra me tiene enamorada.

Dato curioso: llegando al Elogio del Horizonte desde el paseo de la playa de San Lorenzo se llega a la zona verde y hacia abajo se llega a una fuente llamada Fontica, que fue esencial en el origen de Gijón, ya que de ella se abastecían los habitantes.